05 noviembre 2009

El aguacero caía sobre un rostro ya decaído, eran gotas de recuerdos de temores antiguos, pero recuerdos que hacen sentirlos como vivos. 
Esa noche encontré a un poeta, escritor desdichado, perdido entre letras, enloquecido por encontrar la perfección,  un escritor que reune todas las musas.

Unas horas mas tarde fui asaltada por el reconocimiento de dos almas en constantes luchas


  " si logras el poema perfecto nos quedaríamos sin el resto de poemas que provocan las imperefecciones, nos quedaríamos sin que leer, todo por alcanzar la perfección" le dije.

1 comentario:

A dijo...

Las imperfecciones son como los matices que le dan color a la vida y hacen tan único cada poema, cada lucha cada gota de lluvia que se gasta para besar cada pedazo de suelo que pisamos.